Tres días antes de la gran celebración asistí al evento de la Henna, que es como la despedida de soltera, ésto fue en la residencia de la novia, el jardín estaba bellamente decorado con luces y fuimos como 150 mujeres.
Después, el día 26 fue la boda en el hotel Ritz, en un salón muy grande, y espectacularmente adornado estuvimos las más de 300 mujeres invitadas y en otro salón estuvieron los varones. Las mujeres fueron llegando desde las 8:30 pm luciendo unos vestidos largos elegantes y de muy buen gusto, me imaginaba que estaba disfrutando de un desfile de moda o de la entrega de los Óscares, la mayoría de los modelos llevaban pedrería muy al estilo local.
Las chicas bailaban sin parar toda la variedad de su música árabe, inclusive tipo belly dance, hasta que llegó la joven y bella novia vestida de blanco, caminando despacio, sonriendo a todas las presentes y posando para las fotos oficiales, luego ocupó su lugar honor escoltada por unas lindas niñas para recibir las felicitaciones.
A las 12:00 de la media noche cambió el tipo de música y se anunció que ya llegaría el novio, por lo cual todas las mujeres musulmanes, que eran la mayoría, corrieron a ponerse de nuevo su abaya negra y cubrirse el cabello. Inclusive a la novia le cubrieron su pelo con un lindo gorrito blanco y le pusieron una capita.
El novio hizo su entrada junto con su padre, tíos, el padre de la novia y sus hermanos para que así por familias pasaran a tomarse más fotos por grupos familiares. Después de las fotos todos los hombres a excepción del novio salieron del salón.
El novio se quedó un rato más con la novia para partir el pastel, posar para más fotos y bailar una pieza de bals. A las 12:30 el novio salió, las mujeres se quitaron de nuevo la abaya y continuaron bailando hasta la 1:00 am que todo terminó.
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